Hace un tiempo escribí un post sobre storytelling, en el que hacía una definición sobre este y en el que hablaba sobre sus beneficios y las razones por las que utilizar esta técnica. Y la verdad es que, como Content Manager, puedo asegurarte que en nuestra agencia cada vez son más las empresas que piden que les ayudemos a realizar contenidos más emocionales y próximos con esta técnica, el arte de contar historias.
Igual que la canción “Storytelling” de Belle and Sebastian, que dice: “Si eres un narrador de historias, puedes pensar que no tienes responsabilidad. Y puedes llevar a tus personajes a donde quieras, tienes inmunidad”, como narrador de historias tienes derecho a imaginar, inventar, relatar y mostrar aquello que quieras, de manera realista o ficticia.
Desde pequeños escuchamos contar historias de todo tipo; historias que nos hacen reír, que nos hacen llorar, que no emocionan, que nos dan miedo, que nos sorprenden… y estas, conseguían captar nuestra total atención. De tal manera que éramos capaces de volver a contarla una vez escuchado. Y esto, es lo que interesa a las empresas, conseguir que sus historias perduren en la mente del consumidor.
Es por esto, que hoy te voy a dar unos cuantos ejemplos de los tipos de storytelling que puedes utilizar para llegar directamente al corazón de tus potenciales clientes.
Las historias personales siempre son fuente de inspiración para otros. Estas historias que han sucedido a personas reales, pueden estar enfocadas de distintas maneras, pueden ser casos de éxito de la empresa, historias de superación vinculadas con la marca, entre otras.
La finalidad de este tipo de storytelling es generar emociones, despertar sentimientos para que un usuario realice una acción concreta, normalmente vinculada con su decisión de compra.
Un buen ejemplo es el anuncio de la lotería de navidad del 2014, puesto que cuenta una historia basada en hechos reales.
El storytelling basado en los valores de la marca es aquel que cuenta de manera indirecta los valores por los que se rige una marca, es decir, sus preocupaciones, inquietudes, compromisos, etc.
Un ejemplo lo encontramos con la campaña “Alma” de Estrella Damm, que muestra el compromiso de la marca con el cambio climático.
Las historias de ficción son ideales para transmitir un sentimiento o emoción concretos. Esta, al ser inventada, es más fácil explicar y llevar una historia hacia donde quieres llevarla. Estas pueden estar hechas con personajes reales o personajes inventados como por ejemplo personajes de animación.
La historia de Justino de la lotería de navidad 2016.
En este caso, se sitúa en contextos en los que los personajes se muestran en una situación de involucramiento concreto con el producto o servicio anunciado.
Un claro ejemplo es el anuncio The sculptor de Peugeot de 2016.
¿Se te ocurren más tipos de sotrytelling? No dudes en comentarlos y los añadiremos.